Luna nueva en Acuario
La revolución de la conciencia es la revolución del amor
➝ Coordenadas:
Acuario-Tauro-Virgo-Sagitario-Piscis
✦ Caminando el futuro
✦ Desorden en la vida material
✦ Un nuevo sistema
✦ Caducan verdades
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El futuro es ahora
El tiempo libera de sus jaulas a todos los miedos que tienen que ser atendidos, y sus cuerpos, convertidos en frecuencias, surcan la atmósfera como pensamientos voladores, que desde muchas líneas temporales atraviesan seres para que puedan hacer un trabajo de limpieza: convertirlos en amor o volver a encerrarlos.
Se arremolinan tormentas eléctricas que descargan rayos destructores de formas viejas, creando el panorama perfecto para que puedan empezar a florecer cosas nuevas.
Bandadas de golondrinas posadas en los cables de alta tensión se resguardan de la tormenta esperando su momento para desplegar las alas y volar.
Conviven varios tiempos en los mismos espacios para hacer una decantación de la vida. Se cruzan diferentes lineas temporales en el ahora.
Los bichos raros se empiezan a convertir en gente normal, y la gente normal empiezan a parecer bichos raros.
Cada desafío individual tiene un gran trasfondo global. Cada prueba personal recodifica el inconsciente colectivo.
Paraíso e infierno se convierten en la misma cosa, sólo dependiendo de la capacidad de mirar de cada uno.
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Nuevas dinámicas vinculares
Se descontracturan vínculos, para redefinir acuerdos que un día fueron creados en nombre del amor pero que ya prescribieron.
Se caen velos y barreras de un mundo obsoleto para que se sigan tejiendo nuevos puentes que interconecten la red de conciencia.
Las heridas dejan de llamarse heridas para convertirse en llaves mágicas que abren cofres de tesoros.
Las relaciones se convierten en trampolines hacia la soberanía personal y en entrenamientos de conciencia que amplían la mirada.
Los vínculos son el detergente que despega la suciedad del fondo de la conciencia, preparando una limpieza que tiene todo que ver con uno y nada con el otro.
De cada cual depende la limpieza de aquellas instancias internas que en algún momento fueron abandonadas a su suerte.
La pulcritud es la capacidad de metabolizar las tensiones despertadas para convertir demonios en ángeles, venenos en medicina y miedo en amor.
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La rƎVO⅃ución del amor
La revolución de la conciencia es la revolución del amor.
La vida aprieta para terminar de descongestionar el puente hacia la unidad, desde el tercer al cuarto chakra, desde Manipura a Anahata. Desde la necesidad de desplegar un poder personal que defina y separe, hacia la entrega total a una visión de la vida donde todo forma parte y está incluido.
Un arcoíris que se abrió en julio se cierra ahora uniendo momentos y dimensiones con un puente de colores. Es el puente que une Leo y Acuario, el amor y la libertad, la conciencia individual y la colectiva. El caudal que lo recorre es la autenticidad, la creatividad y la expresión del corazón.
El amor destruye códigos que se construyeron en su nombre, pues en esa frecuencia cristalina no hay lugar para condiciones.
El compromiso es con uno, con una expresión total y libre del corazón, y con el presente en la Era de Aire.
La dependencia será sustituida por la interdependencia, la competitividad por la cooperación. Debemos convertir las barreras que separan en puentes que unen.
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La potencia medicinal de la comunicación
La comunicación es la sangre de la Era del Aire, el punto de encuentro ineludible, y el lugar donde permanece la llama eterna, ese fuego sagrado que ilumina pero no quema.
El nuevo tiempo trae la necesidad de actualizar la forma de gestión de los enredos con un entendimiento claro y honesto, que no necesita señalar fuera para ver lo que hay dentro.
La capacidad de estar abierto en comunicación es directamente proporcional a la calidad de vida.
La oxigenación airea cualquier asunto sanándolo.
Debemos aprender a acompañarnos en los vínculos expresando la vulnerabilidad sin dejar que memorias pasadas o manipulaciones sutiles coarten la expresión del otro. Para ello, es preciso la responsabilización de cualquier movimiento interno sin tener que proyectarlo fuera.
El encuentro vincular está orgánicamente diseñado para poder conocer nuestro código fuente y poder reprogramarlo, creando esa constelación externa con las partes que nos cuesta encarnar y darle espacio.
Cuando aprendemos a ver esto, el otro siempre es un espejo-regalo.
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Aprendiendo a vivir en y desde el corazón
Habitar el corazón es el propósito de este proceso de ascensión.
La 5ª dimensión o el salto de conciencia son nombres diferentes que le damos al mismo proceso.
Vivir desde el corazón es la única salida de los juegos de poder y la competitividad. Y aunque pueda parecer paradójico, a veces el mayor de nuestros miedos es el verdadero amor.
Encarnar el corazón implica empezar atendiendo todo lo que en algún momento quedó bloqueado en él. Aquello que no nos permitimos expresar, esos huecos donde no se sintió el amor, sentimientos de culpa, envidias que se proyectan por no darle espacio a la expresión propia del ser.
El corazón es como una casa de campo abandonada, que para poder habitar, debemos empezar limpiando y convirtiendo en un espacio protector que nos acoja.
Todo lo que enturbia un corazón bloquea su propio brillo, no permitiendo que ese lugar central sea un espacio seguro, y la calidad de ese templo interior es la fuente de toda la realidad externa.
Habitarse debe ser un regalo divino y constante, para poder ver con claridad que no hace falta buscar nada fuera, pues ya somos plenitud.
Es necesario aprender a tenerse para poder abrir espacios compartidos íntegros y saludables. Que compartir sea unir esos espacios individuales de seguridad y plenitud.
Debemos convertir nuestro corazón en nuestro templo interior y refugio, aprender a escuchar todo lo que expresa cada latido, a regular ese pulso que nos hace estar vivos, a ver con claridad el impacto que provoca en él en toda su interactuación con el exterior.
Debemos perderle el miedo al amor y al propio miedo, rescatar nuestras heridas olvidadas para que dejen de ser heridas, poder mirar esos huecos donde un día faltó el amor.
Debemos aprender a regular nuestro campo electromagnético cuando hay una interferencia que lo perturba, a no dejarnos devorar por la reacción, a no identificarnos demasiado con lo que otro irradie, y a saber responder con la medicina del amor.
Debemos darle espacio a cualquier pulsión desde la inocencia, aprender a habitar la frecuencia del amor en el cuerpo, a tener la mirada limpia para poder darle a la vida el sonido singular de nuestra esencia.
Tenemos que aprender a convertir el dolor en amor, a navegar nuestras aguas sin ahogarnos, a saber respetarnos, a estar a la escucha, y a tener claridad en ese lugar desde el que nos movemos.
Hay que romper el tejido de miedo e inseguridad que bloquea la luz de nuestro brillo, y disfrutar el brillo de cualquier otro ser.
Tenemos que convertirnos en nuestras mejores versiones para vernos como más nos gusta y para querernos como al amor de nuestra vida.
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Mantra:
Me reconozco fruto del amor y de la vida.
Me reconozco puente entre el cielo y la tierra.
Yo soy amor.
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➝ Medicina:
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➝ Decantación:
¿Me atrevo a ser una nueva versión?
¿Encarno la mejor de mis versiones?
¿Habito somáticamente mi corazón?
¿Soy un buen refugio para mí?
¿Me hago cargo de limpiar mis instancias internas?
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➝ Astroexcusas:
✦ Localiza el grado 20 de Acuario: Allí empieza una nueva era.
✦ Localiza el segundo decanato de Virgo: Allí está una grieta por dónde se expresa una gran tensión emocional.
✦ Localiza las casas de tu carta donde están Leo y Acuario: allí se ha abierto un puente de creatividad entre amor y libertad.
✦ Moldea tu forma de actuar para no ser gobarnado por una reacción inconsciente.
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De corazón a corazón,
Olmo.
